Emocionante reencuentro de Leyendas España en la vuelta de la Selección a Zaragoza

Emocionante reencuentro de Leyendas España en la vuelta de la Selección a Zaragoza

Busquets, Gayà, Pau Torres o Yéremi Pino recibieron también su Dorsal de Leyendas en un homenaje a internacionales vinculados a Aragón, con Señor, Solana, José Ignacio, Güerri, Javi Moreno, Paco Santamaría o Carmelo Cedrún, además de un emotivo recuerdo a Lapetra, Violeta o Bustillo

Desde el Dorsal de Leyendas España 233, Carmelo Cedrún, representado por su hijo Andoni, hasta Yéremi Pino, el 832, uno de los últimos en debutar con la Selección, Zaragoza acogió, con motivo de la vuelta de la Selección Española, un nuevo reencuentro de Leyendas en que se reunió y homenajeó al ayer y hoy de la Roja, con un emocionante recordatorio a míticos internacionales aragoneses ya fallecidos.

El presidente de la RFEF, Luis Rubiales, junto al de la territorial aragonesa, Óscar Fle, y el de Leyendas España, Fernando Giner, se mostró “feliz” de que la Selección haya vuelto a Zaragoza y del reconocimiento a las figuras que ayudaron a construir la historia del combinado nacional. El mítico Señor, “orgulloso y agradecido de este homenaje a los internacionales de esta tierra”, Solana, Güerri, Carmelo Cedrún, Paco Santamaría -representados estos dos últimos por sus hijos-, Javi Moreno o José Ignacio recibieron la camiseta con su Dorsal de Leyenda. Previamente, el periodista de Aragón TV Óscar Marco ayudó a poner en valor la histórica aportación de jugadores con pasado zaragocista en la Selección. El momento más emocionante llegó con el recuerdo a tres ilustres internacionales zaragozanos, José Luis Violeta, fallecido este mismo año, Miguel Ángel Bustillo y el inolvidable Carlos Lapetra, uno de los fundadores de la Asociación Española de Futbolistas Internacionales. Los actuales jugadores de la Roja, el capitán Sergio Busquets, José Luis Gayà (vocal de la Junta Directiva de Leyendas España), Pau Torres o Yéremi Pino también participaron en un nuevo acto de reconocimiento a los internacionales absolutos de la Selección de todas las épocas, cuyo valor y compromiso social reivindicó Fernando Giner en su discurso final. Otro emotivo y merecido bonito preámbulo itinerante a un partido de la Selección. Orgullo de pertenencia.